Por: Zulmaire González / El Universal
20-04-2013
"Diputado opositor que no reconozca a Nicolás Maduro como presidente, no lo reconozco en la Asamblea Nacional."
Estas palabras fueron pronunciadas por Diosdado Cabello, presidente de la Asamblea Nacional en fecha 16 de abril de 2013 durante sesión ordinaria celebrada en ese hemiciclo, al referirse a los diputados que representan a la bancada de la oposición; posteriormente este mensaje fue reiterado por Cabello a través de su cuenta personal Twitter, con el propósito que los quinientos cincuenta y siete mil personas que lo siguen a través de esa red social pudiesen conocer cómo se conducirá en lo sucesivo dentro de la Asamblea Nacional la relación con los diputados opositores.
No es la primera vez que el diputado Cabello recurre a un lenguaje agresivo para intimidar y amenazar. Los opositores al régimen han escuchado frases como: "ustedes tenían que haber rezado mucho para que Chávez siguiera vivo, señores de la oposición, porque Chávez era el muro de contención de muchas ideas locas que a veces se nos ocurren a nosotros"; "Si intentan cualquier acción contra el pueblo y contra la revolución les vamos a dar una respuesta contundente que no le van a quedar más ganas"; "Aquí hay una revolución militar en marcha y debe ser permanente. No puede detenerse".
Las frases y acciones de Diosdado Cabello inevitablemente traen a la memoria el hecho histórico denominado "la noche de los cuchillos largos", que consistió en ejecuciones perpetradas por la Alemania nazi en 1934, cuando Hitler y sus seguidores ejecutaron a enemigos y disidentes políticos y arrestaron a la mayoría de los que consideraban amenaza y criticaban al régimen.
Diputado Cabello, ¿las declaraciones del 16 de abril es el resultado de la profunda autocrítica que manifestó debía hacerse después que se emitieron los resultados electorales del domingo? Más allá de criticar su postura y señalar que es ilegal y contraria al texto constitucional la censura a los diputados de la bancada de la oposición, que se pretende imponer en el seno de la Asamblea Nacional, es oportuno manifestarle que esa clase de actitudes violan derechos humanos como la libertad de expresión, y además recordarle que la visión de esa institución, la cual preside, es "ser un poder legislativo nacional, democrático, protagónico, pluricultural y descentralizado, que consolide los valores de la libertad, la independencia, la paz, la solidaridad, el bien común, la integridad territorial, la convivencia y la pertinencia de las leyes para esta y futuras generaciones". Valores que lamentablemente están hoy día en entredicho, pues se promueve violencia e intolerancia, abuso de poder, irrespeto, dentro de esa institución que debe ser un modelo de inclusión para el país.
La situación antes descrita genera gran preocupación al suponer que, luego de la profunda autocrítica que realizó el diputado Cabello debido a los resultados del 14 de abril y con el propósito de dar continuidad al proceso revolucionario iniciado por Hugo Chávez, se pretenda emular al mejor estilo nazi "la noche de los cuchillos largos".
La actitud de Diosdado evidencia al naturaleza autoritaria de un régimen que no cree en la democracia. La lucha contra esté régimen neo totalitario es una lucha de principios y valores, que nace de nuestra aspiración de vivir en democracia, y en consecuencia va mucho más allá de una mera cuestión de balances de mayorías vs minorías. Cuando se afectan los principios del estado de derecho y valores democráticos, es nuestro deber oponernos a ello, sin importar si somos mayoría o no
ResponderEliminar